Era 1997 y la Princesa Diana de Gales, animada por sus hijos a vender algunos de sus vestidos para reunir fondos para sus actividades altruistas, contactó al talentoso fotógrafo de moda Mario Testino ,para que la retratarla en una sesión fotográfica que definió toda una era tanto para Lady Di como para Mario Testino. Esa sesión fue definitiva en su carrera pues le hizo llamar la atención de la Princesa Diana de Gales algunos años después, que permitieron abrirle las puertas para retratar a otros miembros de la realeza de distintas casas del mundo. La princesa moriría unos meses después de la sesión en un accidente en París.
De origen peruano, Mario Eduardo Testino Silva es una de las más grandes figuras de la fotografía de moda en el mundo, pero también lo es para la apreciación artística.
El mencionar su nombre atado a la consigna de su origen, le hace sentir que engrandece a Perú junto con él.
Nace en 1954 en Lima, y de acuerdo a sus propias palabras, el ímpetu para salir de su país fue “el clima conservador de Perú”. Pero antes de mudarse a Londres en 1976, estudió las carreras de Economía, Derecho y Relaciones internacionales. Aunque su pasión estaba en la fotografía tal y como lo averiguaría en Londres; y para convertirla en su modo de vida tuvo que pasar por situaciones difíciles. Consiguió una habitación para vivir en un hospital abandonado y vendía paquetes de portafolios fotográficos a las incipientes modelos de Reino Unido, que les incluía peinado y maquillaje.
Después de una larga travesía como mesero, y siendo un fotógrafo incipiente con una cabellera teñida de rosa, logra su primer éxito importante en 1983, cuando su trabajo aparece en la revista Vogue ese año.
Para el, la fotografía de moda le pertenece al fotógrafo cuando captura la expresión que busca generar. Baila, ríe, hace bromas, y en general se deja ser tal cual es para capturar la esencia de un momento natural. No sin antes haber trabajado tanto tiempo como le requiera atrapar la luz que se refleja de la personalidad que fotografía, siempre teniendo listas las condiciones de la necesaria perfección, porque eso es Mario Testino: un perfeccionista.
Por su lente han sido capturadas las sonrisas de la realeza británica. Pero también las grandes estrellas de todos los ámbitos posibles. Actores, cantantes, modelos y personas de la alta sociedad de todos los países. Pero fue en una sesión con Madonna en 1995, en la que la cantante fue inmortalizada por la lente de Testino usando la Tiara Versace.
El trabajo de Mario Testino no sólo lo convirtió en un defensor de las artes en el mundo de la moda. Como lo dijo en una entrevista alguna vez: “la moda es la expresión más básica del arte. Es el modo más sencillo que tenemos todos los días para expresarnos y decirle al mundo, quienes somos y como nos sentimos al elegir que nos vamos a poner para salir o para estar en casa”. Y es que aun cuando nos encontramos totalmente solos, nos hablamos a nosotros mismos a través de lo que hemos elegido usar. No en vano recibió distinciones más allá de todos los premios que puede otorgar el mundo de la moda, sino que también varios gobiernos le han reconocido como en 2007 con la Gran Cruz de la Orden al Mérito de Lima y la medalla Tiradentes de Rio de Janeiro en 2007, la Gran Cruz de la Orden al Mérito por Servicios Distinguidos de Perú en 2010, la medalla de Oro del Instituto español Reina Sofía en 2011, la Orden del Imperio Británico en 2013 o la Orden de la Legión de Honor de Francia en 2017 entre varías más.
No es para menos. Su aportación a la filantropía y al arte le llevaron a fundar el museo MATE en Lima, donde además de impulsar el talento adolescente para la fotografía con talleres que se conectan con la fundación Delfina en Londres, se han establecido exposiciones permanentes y talleres de los que han emergido nuevos talentos fotográficos muy importantes. Con más de 15 libros publicados en su haber y el calendario Pirelli de 2001, Mario Testino también es el presidente del Fondo mundial de Monumentos en Perú. Además de haber iniciado la creación de los Parques Teresita (nombrados en honor a su madre Teresa Silva) que inició como un proyecto de la mano de la modelo rusa Natalia Vodianova, con quien colaboró en varias ocasiones para recaudar fondos para su fundación Naked Heart que ayuda a niños de escasos recursos.
Recientemente, con motivo de los feroces incendios que devastaron Australia, Testino realizo un proyecto que buscaba recabar fondos para ayudar mediante la donación de su trabajo en edición limitada, en apoyo de las organizaciones que lucharon por salvar de la destrucción que tuvo lugar a inicios de este año.
Actualmente Testino se encuentra en Perú, trabajando en el aislamiento de la cuarentena por COVID19, en contacto con su equipo MarioTestino+, el cual enlaza oficinas en distintas partes del mundo para continuar con su trabajo artístico, siguiendo la directriz que lo caracteriza en las enseñanzas del los talleres que se dan en el MATE: trabajo duro, perfectible y sobre todo natural para expresar al mundo la belleza del arte.